domingo, 13 de febrero de 2011

Por una buena SALUD

Es fundanmental una alimentación y una nutrición adecuadas en las diferentes etapas de la vida. Como adultos debemos ser conscientes y saber que de un correcto equilibrio alimentario dependen prácticamente todas nuestras actividades y relaciones: buen rendimiento en el trabajo, el descanso por las noches, los vínculos con familia, pareja, amigos e hijos/as... siendo necesario transmitir esta importancia a nuestros niños/as.
Mantener una buena alimentación constituye una de las necesidades básicas de todos los seres humanos y para el pleno desarrollo del organismo (incluyendo  la mente).

La etapa de la infancia es el periodo más importante de nuestra vida, sobre todo porque en él tiene lugar el crecimiento y el desarrollo del organismo.  Pero...¿qué requiere el organismo para crecer con salud durante la infancia? pues un aporte extra de energía y de los diferentes nutrientes. Cuanto más saludables sean y mejor equilibrada sea la dieta infantil, con mayor salud y energía crecerá el organismo  de nuestros pequeños.
Pero también es importante destacar que en esta etapa es clave para enseñarles a los niños/as a alimentarse de manera saludable. Como dice un refrán popular muy acertado "es preferible no dar el pescado sino enseñar a pescar". Estas sanas costumbres que hay que inculcar en los niños y en las niñas incluyendoe  un buen disfrute del tiempo de ocio (con la importancia de hacer algún deporte y otro tipo de actividad física de manera regular) para evitar  futuras enfermedades (obesidad, hipertensión,...etc).


Para apostar  por una dieta equilibrada: nos podemos guiar por la Pirámide de la Alimentación Saludable.

Según la pirámide, la base de tu alimentación debe estar compuesta por alimentos ricos en hidratos de carbono; cereales preferiblemente integrales y sus derivados, patatas y legumbres. Conforme avanzas hacia el vértice, encontrarás aquellos alimentos que has de consumir en menor cantidad o más ocasionalmente. En la cúspide encontrarás por tanto los alimentos grasos (salvo el aceite), y otros como azúcar, dulces, refrescos, bollería, etc., que has de consumir de forma ocasional.


Pero tampoco hay que olvidar la actividad física. Aquí os dejo otra pirámide; esta nos muestra de forma muy gráfica la  frecuencia de las actividades que pueden realiazar  niños/as.

2 comentarios:

  1. Me encantan tus comentarios y ver tu blog. Estás hecha una experta y además tus entradas tienen miga, como la de la alimentación.
    Un beso muy grande.

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias, Paqui. Sigue visitándonos. Muchos besos

    ResponderEliminar